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Conducir Distraídamente se ha Convertido en un Problema de Proporciones de Plaga
Conducir distraídamente ha existido tanto tiempo como conducir en sí mismo, pero la evidencia sugiere que ha empeorado constantemente. De hecho, el conducir distraído se ha convertido en un problema de proporciones de plaga.
Los registros recopilados por la National Highway Transportation Safety Authority (NHTSA) revelan que cerca de 40,000 estadounidenses mueren cada año, con cerca del 16% de los casos causados por el conducir distraído. Para poner eso en cifras brutas, significa que unos 6.000 estadounidenses mueren cada año en las carreteras a causa de conducir distraído. Igual de aterradoras son las cifras de los accidentes automovilísticos. Tomando la cifra del 16% y extrapolándola al número de accidentes automovilísticos anuales, significa que un millón de accidentes cada año se deben a la conducción distraída.
No es fácil determinar la causa de un accidente automovilístico cuando ha sido causado por alguien distraído por su GPS o un mensaje de texto. Es mucho más fácil darse cuenta de que alguien estaba borracho cuando causó un choque, o que no se detuvo en un semáforo en rojo, o que viajaba demasiado rápido para las condiciones. A menudo es un caso de eliminación. Si nada más parecía haber causado un accidente, entonces tal vez se debió a la distracción al conducir.
La conducción siempre ha tenido sus distracciones. Antes de que existieran los sistemas GPS, existían los mapas y los libros de mapas. Se podría argumentar que mirar un mapa en el regazo de un conductor mientras atraviesa el tráfico es probablemente más peligroso que utilizar un sistema GPS moderno. Comer y beber también ha sido una causa común de distracción al conducir. Entonces, ¿qué ha impulsado el aumento últimamente?
La respuesta a esta pregunta es puramente hipotética, ya que no hay datos concretos que nos den pistas reales. El sospechoso más probable es la comunicación moderna y el deseo de mantenerse conectado en todo momento. La combinación de los medios de comunicación social, los trabajos que ya no terminan cuando la gente deja su lugar de trabajo y los medios para comunicarse en casi todas partes, es un cóctel mortal. Algunas personas piensan que el aumento constante en el número de personas en movimiento que obtienen comida para llevar de los restaurantes de comida rápida hace que sea más probable que los conductores estén comiendo hamburguesas u otros bocadillos mientras conducen.
A esto se añade el hecho de que muchas personas tienden a pensar que la conducción distraída no es tan socialmente 'incorrecta' como muchas de las otras causas de colisiones: intoxicación, exceso de velocidad, conducción agresiva, correr riesgos al adelantar y pasar un semáforo en rojo. Es aterrador ver a un conductor de autobús o de taxi haciendo una llamada telefónica o enviando un mensaje de texto a alguien con su teléfono celular mientras usted está en el mismo vehículo que ellos, pero ¿cuántas veces lo hacemos nosotros mismos?
Defender un cargo de conducción distraída
La conducción distraída puede haberse convertido en un problema grave, pero eso no significa que tenga que pagar una multa por algo que no hizo. A veces, un oficial de policía puede intentar acusarlo de conducir distraído sin pruebas suficientes. En Florida, el uso de su dispositivo móvil para enviar mensajes de texto es ahora ilegal y un policía de tráfico puede detenerlo si lo ve y entregarle una citación. Una condena significaría puntos, una multa y honorarios de la corte si usted lucha contra la boleta y pierde. A partir de enero del año que viene, el uso de un dispositivo móvil en una escuela o zona de construcción acarrearía penas más severas. Si el uso del dispositivo u otra distracción causó un accidente en el que alguien resultó herido o murió, entonces esto podría considerarse como conducción imprudente, lo que constituye un delito. Se le aconseja que luche contra una citación ya que las posibilidades de ganar son buenas si contrata a un abogado de boletas.
Si usted está enfrentando un cargo de delito menor de conducción imprudente, entonces seguramente no querrá tener una condena penal colgando sobre su cabeza. Comuníquese con el experimentado y dedicado abogado defensor penalista de Miami, Albert Quirantes, Esq. Puede comunicarse con su bufete de abogados al 305-644-1800. Está a sólo dos cuadras al oeste del estadio de béisbol Miami Marlins en 1815 NW 7th St., Miami, FL 33125.
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